Crítica de arte
Haciendo camino
Severiano Monge. Pintura. Bar Santana. Segovia. Hasta el 15 de noviembre.
Jesús Mazariegos
Los pintores
autodidactas son una raza especial de artistas que parece que para compensar
los estudios de Bellas Artes que no hicieron están siempre ávidos de aprender y
se fijan en los maestros y van y vienen y tienen siempre el ojo abierto y saben
escuchar. Algunos de ellos, que han triunfado internacionalmente y han pasado a
otros niveles más elevados de reconocimiento, no se ajustan exactamente a este
esquema.
Severiano Monge es el
modelo perfecto del primer caso, siempre investigando, innovando, probando
técnicas y recursos, aprendiendo de los demás, asociándose en colectivos de
artistas y trabajando incansablemente por las ciudades y tierras de Castilla.
En este momento en el
que apunta hacia el hallazgo de un lenguaje personal, un ideal a mi juicio no
tan necesario o al menos no tan urgente, mantiene varios registros
perfectamente apreciables en las obras que expone en el Bar Santana. Desde el
correcto convencionalismo del díptico nevado hasta los acueductos románticos y
visionarios, resueltos con notable frescura, pasa por el paisaje urbano de
grandes pinceladas y ajeno a los consabidos recursos del suelo mojado y cosas
por el estilo.
Una única objeción. El
cuadro que representa gente sentada en una terraza, cubierto parcialmente por
una emulsión roja transparente, me parece que es un cuadro que aguantaría bien
sin esa especie de sirope de fresa y, en caso de no aguantar, ese no es modo de
arreglarlo sino de disimularlo. Es este un recurso que repite en más obras y no
deja de ser un recurso efectista y resultón pero que resta franqueza a la
pintura.
Me da la impresión de
que ese afán de aprendizaje al que antes me refería está en contra de la búsqueda
de un lenguaje personal o, mejor dicho, del hallazgo del lenguaje personal que
Severiano Monge lleva dentro. Es posible que si se vuelve hacia dentro, si se
olvida de recursos incorporados de última hora, encuentre su propio y verdadero
camino y descubra su propia manera de hacer, su propio estilo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario