CRÍTICO DE ARTE JESÚS MAZARIEGOS

miércoles, 26 de octubre de 2011

ÁBUM FAMILIAR CAJA MADRID, 1939-1978. 2008


Crítica de arte

El alma en blanco y negro

Álbum familiar Caja Madrid 1939-1978. Álbum familiar 2006. Fotografías de origen diverso. Casa de los Picos. Hasta el 13 de febrero.

Jesús Mazariegos

        Hay en el catálogo de esta exposición un texto de uno de sus comisarios, Rafael Doctor, actual director del MUSAC de León, en el que cuenta una historia verdaderamente novelesca y presentada como real, en la que su padre y él hubieron de enfrentarse a una especie de loco coleccionista de fotografías, perseguidor de la totalidad y buscador de una fotografía en la que se percibiera bien la luz del alma. El final de la historia se relaciona con una fotografía familiar en la que el autor del escrito aparece, de niño, junto a sus padres y a su hermana.
        No sé si las fotografías tendrán almas fijadas a las sales de plata o pequeños fragmentos de las almas de los retratados, pero lo cierto es que las fotografías, especialmente si son ejemplares únicos, como suele ocurrir con los álbumes fotográficos familiares en blanco y negro, poseen un carácter casi sagrado basado en el respeto al recuerdo de los retratados. No creo que ninguna persona sensible sea capaz de pisar o escupir la foto de su madre o de cualquier otro ser querido; incluso no daría muestras de ser una persona equilibrada quien fuera capaz de hacer tales cosas con la foto de cualquier otro semejante.
La exposición de fotografías domésticas, sin pretensión artística, que llenan los muros del zaguán y del patio de la Casa de los Picos, nos producen la sensación de estar viendo el propio álbum familiar y, según la indumentaria, los peinados, las actitudes o el escenario de fondo, encontramos semejanzas, no siempre fáciles de explicar, con tal o cual época, con éste o aquel acontecimiento, en referencia a nuestras propias vidas.
Es ésta una exposición para ver despacio, foto por foto, como en un recorrido paralelo a ese viejo álbum familiar, el cual, a buen seguro, rescataremos del olvido tan pronto regresemos de la exposición a casa. Estamos, además, ante un mundo a extinguir, dada la generalización de los soportes digitales, cuya permanencia en el tiempo dudo mucho que sea equiparable a la de estas verdaderas estampas laicas, soporte de nuestra memoria individual y colectiva.

No hay comentarios:

Publicar un comentario