Crítica de Arte
Corot versus Euler
Eduardo Garay. Fotografía manipulada digitalmente. Bar San
Martín. Segovia. Hasta finales de Julio.
Jesús Mazariegos
Desde hace más o menos un mes, las paredes del Bar San
Martín, antes Gimnasio, cambian su decoración cada semana. No cambia el autor
pero sí las obras, no cambia el tema de fondo pero sí los asuntos concretos, no
cambia la técnica general pero sí la manera de utilizarla en cada caso.
El autor es
nuevo en el mundo del arte pero no en Segovia, y su técnica es la fotografía
pero sus fotos no son como las demás. Eduardo Garay lleva mucho tiempo haciendo
fotos pero ésta es la primera vez que presenta al público unas obras que son
mucho más que fotos. A partir de fotografías nada vulgares, Garay crea
verdaderas 'pinturas fotográficas' -si se me admite la expresión- o, más bien, 'fotografías
pictóricas'. El artista somete
a las imágenes a un determinado
tratamiento con programas de extraños nombres que permiten manipular las
imágenes, de una manera que, salvando las distancias, viene a ser algo así como
el trabajo del musivario o mosaísta, que parte de que la realidad está
fragmentada en pequeñas teselas y trata de reconstruirlas de modo que de lo
múltiple surja lo unitario. El proceso tiene que ver también con el trabajo del
pintor puntillista o, llevado al extremo, como la fotografía digital o la
televisión.
Pero no es
nada de eso. La obra de Eduardo Garay, por mucha tecnología digital que
utilice, me parece una obra artesanal y artística, pictórica, sensible y
creativa. El artista no se limita a 'pixelizar' las fotografías, sino que crea
ambientes cromáticos personales y convierte la realidad en poliédrica, un
poliedro multiforme refractario a la fórmula de Euler y a cualquier disciplina
tecnológica. Cézanne se pintaba a sí mismo con disciplinadas pincelas cada una
de las cuales venía a ser una cara del macropoliedro de su cabeza. Eduardo
Garay, en verano, ve el mundo con la luz de Corot; en invierno, cuando nieva,
puede acordarse de Sisley, pero al atardecer y en todo momento, bebe del manantial
de luz del cielo segoviano y la pone estaciones, horas y hasta temperatura. La
tecnología es sólo una herramienta. Corot ha vencido a Euler.
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